martes, 24 de julio de 2012

Militares y narcotráfico: La negativa de Seineldín que encolerizó a Menem Por Jorge D. Boimvaser

Seineldín
Trataremos de hacer en un par de carillas lo que precisaríamos un libro para decirlo todo. Seineldín no era golpista, no era nazi, no participó en la "guerra sucia" de los 70 y no estuvo a favor del golpe de Estado del 76. Aunque su ideología era entre extraña y absurda (algo medieval), su accionar tuvo sólo el desliz de tomar un regimiento a comienzos del menemismo, y lo hizo para ponerse al mando de su tropa y dar la cara por todos los soldados desorientados por el movimiento "carapintada".

Estas declaraciones le hizo el entonces coronel en actividad al autor de estas líneas, fue en una charla informal que después publiqué en el diario La Prensa.  Recuerdo lo qué le dije en nuestro encuentro: "No me siento a la mesa de ningún antisemita. Así que ponemos las cosas blanco sobre negro antes de hablar para que ninguno esté incómodo". 

"Milo" (así le decían a Seineldín) no esgrimió la tontería de decir "... tengo un amigo judío, ¿cómo voy a ser antisemita?".  Estuvimos de acuerdo en eso de respetarnos mutuamente y ahí comenzó una charla que después derivó en amistad personal, o al menos encuentro afectuoso donde siempre hablábamos de ver una Argentina mejor. 

Imposible hablar con Seineldín de otro tema (ni fútbol, ni minas, ni arte... solo de la Argentina.. de vicios imposible, el hombre era más sano que una planta de lechuga).

Lo visité en Campo de Mayo donde estuvo detenido en los 90 por la sublevación"carapintada".

Y ahora que se habla o copia el modelo brasilero de combatir el narcotráfico hasta con la excusa de hacer obra de contención social en las favelas locales, recuerdo su confesión en aquel almuerzo liviano y sin vino (no soy abstemio, vale aclararlo).

Casi textual recuerdo sus dichos de una charla privada con Carlos Menem casi antes que asumiera la Presidencia en 1989. Zulema Yoma seguro recuerda sus dichos, porque también lo hablé con ella en privado.

Así me habló entonces Seineldín: "Menem me pidió que organizara una fuerza militar dispuesta a luchar contra el narcotráfico. Los militares argentinos veníamos de la barbaridad de los 70 (Seineldín nunca avaló la política de secuestros-desapariciones... sí la de combate franco en campos de batalla contra las organizaciones armadas)... y además yo venía de ver la experiencia de Centroamérica...".
Nota al pié. Cuando el alfonsinismo no sabía que hacer con Seineldín, lo envió a Panamá a instruír a tropas de élite del entonces General Noriega, un dictadorcillo de cotillón que lo sacaron los yankys encerrándolo por narcotraficante en Miami.

Allí estuve algunas veces invitado por Seineldín.

Volvemos a su charla en Campo de Mayo: "Le dije a Menem que nunca avalaría que el Ejército participe en acciones de narcotráfico. Por tradición eso lo hace bien Gendarmería, pero mi experiencia en Panamá y sus inmediaciones me mostraron que todo lo que toca el negocio de las drogas lo corrompe. Y no quiero meter al Ejército en un nuevo problema a mediano plazo... Los militares que en Centroamérica se metieron en ese terreno de luchar contra las drogas salieron muy ensuciados. Mucha plata en juego debilita las conciencias. Menem no estaba acostumbrado a que alguien no le dijera que sí como obsecuente, pero yo siempre pensé así".

No importa si fue así de textual, pero esos fueron los conceptos esgrimidos por Seineldín.
Y ya que estamos en esta historia, una anécdota que no puedo dejar de relatar. En 1988 se estaba formando en Panamá una especie de encuentro de militares nacionalistas, algo que tenía el nombre de "bolivariano".

Seineldín me presentó a un gordito rechoncho venezolano que hablaba hasta por los codos. Todo lo que salía de su boca era terriblemente anti izquierdista (¿si te digo macchartysta ubicás a qué me refiero?.): Hablaba pestes de Fidel Castro, del sandinismo nicaragüense y de otros movimientos marxistas.

Para este pequeño hombrecito todo lo que tuviera sesgo de izquierda o usase términos como "liberación", era sinónimo de ser además afín al narcotráfico y había que acabar con esos flagelos.

En un aparte de una cena, le dije a Seineldín: "Milo, yo vengo de la izquierda... está bien que no todos pensemos igual... pero este tipo ya es un obsesivo. Que marxismo y narcotráfico sean lo mismo es de ignorante".

Seineldín era un conciliador por naturaleza, aún con personajes totalmente indeseables.
Pasaron los años. Ese tipejo delirante ocupó la plana mayor de la prensa latinoamericana y mundial.

Acertaste. Es el mismo. Se llamó entonces y se sigue llamando Hugo Chávez Frías. 

El 2 de septiembre del 2009 Mohamed Alí Seineldín murió de un infarto.  Hombre de costumbres austeras, vida ultra sana aunque a veces pensamientos fuera de lugar, supo bien medir lo que significaban los militares incurso en la guerra contra las drogas. Lo decía de otra forma, pero el concepto era y sigue siendo: "Esa guerra se perdió desde antes de comenzarla".

Antes que los blogueros kirchneristas comienzen a operar como presuntos lectores que opinan. Deben saber que Seineldín estaba muy de acuerdo con Néstor Kirchner, con quien mantuvo algunas reuniones secretas de las cuáles nunca trascendió de qué hablaron. 

3 comentarios:

  1. A ver pedazo de pelotudo, primero tranquilo con eso de blogueros kirchenristas que acá el único Operador Certificado sos vos, segundo ¿porque no contás la verdad acerca de Seineldín?, porque le pasás cerca pero no te metés contra tus patrones de la companía. En épocas de crisis hay que cuidar el laburo ¿no? Yo no olvido de aquel triángulo de las Bermudas en que el Coronel se perdió y nunca mas se recuperó. Bush y el turco mirando por el ventanal mientras el empleado del mes, hoy embajador, lo cagaba a tiros y barría lo último un poco decente que quedaba del EA después de la traicion del genocida Videla y el forro Massera. Y lo barría no por antidemocrático o golpista sino por antiimperialista para podeer aplicar las políticas del consenso de W sin temor. Nunca comulgué con el coronel, demasiado fundamentalista católico para mi gusto pero siempre me quedó claro que era un honorable soldado que por cierto quería a su patria libre e independiente. Al fin vos que podrías ser periodista te quedaste en la chismosa del barrio que lleva y trae. Y bué al que nace sorete es al pedo que lo perrfumen.

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  2. LA VERDAD QUE OS UN PELOTUDO IMPORTANTE, NO SABES UN CARAJO Y TE GASTAS EN HACER SEMEJANTE BLOG, INFORMATE MEJOR, ASI PODES HACER UNA NOTA MEJOR,!

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  3. Jorge, perdonálos, su programación mental no les permiten ver las cosas desde otra perspectiva por lo tanto no saben lo que ven, no saben discernir, no saben lo que leen y mucho menos interpretar y/o comprender. Saludos

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