jueves, 19 de mayo de 2011

Se acabó el amor entre el Colorado y Mauricio


La pareja, desgastada, llegó a su fin. El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, y el diputado Francisco de Narváez reconocieron que se encuentran distanciados y que se reeditará la alianza electoral Unión-Pro que ambos utilizaron para las elecciones de 2007 y las legislativas de 2009.

De Narváez evidenció las diferencias al asegurar que no existía ningún pacto entre ambos sectores y que "todavía no" definió a qué candidato a la Jefatura de Gobierno porteño acompañará. "Él (por De Narváez) decidió construir un proyecto propio", aclaró Macri, luego de las frustradas conversaciones con el precandidato a la Gobernación por Unión Celeste y Blanco.

Macri y De Narváez se vieron por última vez hace dos semanas, cuando se reunieron para analizar la posibilidad de integrar una coalición electoral que enfrente al kirchnerismo, pero no lograron avances por las diferencias.
"Habíamos diseñado en Unión-Pro que él como candidato a gobernador bonaerense me apoyaba a mí como candidato a Presidente, pero decidió construir un proyecto propio", señaló o Macri.
Sin embargo, el diputado del PJ disidente aseguró que Macri "no" era su candidato a Presidente y subrayó que su prioridad era cerrar un frente con el radicalismo para los comicios nacionales.

"El decidió quedarse en Capital y me parece correcto", manifestó De Narváez, quien agregó que "todavía no" eligió a qué candidato a jefe de Gobierno porteño apoyará en las elecciones del 10 de julio, en la Ciudad.

Macri y De Narváez habían lanzado el frente Unión-Pro en febrero de 2009, en el que también había tomado parte Felipe Solá, una experiencia que habían comenzado a recorrer en 2007 en la provincia de Buenos Aires por parte de aquellos dos primeros dirigente.

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