El fútbol argentino en la actualidad sufre un raro mal: van varios fines de semana en los que se termina hablando más de las polémicas actuaciones de los árbitros que del juego en sí. Al respecto, una voz autorizada si las hay se encargó de diferenciar las épocas del arbitraje de hace un tiempo con el de ahora. El ex árbitro Carlos Mastrángelo aseguró que "los códigos que cambiaron en la relación con los jugadores".
"Antes, cuando yo dirigía, entre fines de los 80 y durante toda la década del 90, éramos seis o siete los árbitros que estábamos en casi todos los partidos, tanto en el ámbito nacional como internacional. Y los códigos eran otros", sentenció Mastrángelo en una entrevista con el programa radial Deportivo Télam, y además agregó: "En aquellos tiempos jugaba cada nene, como por ejemplo Oscar Ruggeri, José Luis Chilavert, con los que el trato era diferente porque nos conocíamos mucho”.
En tiempos en donde el arbitraje se pone en tela de juicio cada fin de semana y donde las denuncias de sobornos e incentivación se suceden cada vez con más frecuencia, Mastrángelo se encargó de contar con detalles su experiencia personal y las abismales diferencias con la actualidad: "Personalmente, siempre fui un calentón. Por eso, cuando nos cruzábamos mal en la cancha, los desafiaba a pelear afuera. Nunca tuve problemas en arreglar las cosas a las trompadas, pero sin que se enterara nadie. Y el árbitro tiene una ventaja sobre el jugador cuando está dentro de la cancha: entra armado. Pero debe saber como usar esos elementos de que dispone. Esas armas son una pistola 22, una 38 y una 45. La primera es la advertencia, la segunda es la tarjeta amarilla y la tercera la roja", sintetizó el ex colegiado.
Mastrángelo, que luego de dejar el referato se dedicó a la actuación y se recibió de periodista deportivo, contó también que aconseja mucho a su hijo, que se encuentra dirigiendo en las categorías de ascenso. “En toda mi carrera manejé esos valores y mal no me fue. Primero hay que hablarle al jugador antes de desenfundar las tarjetas. Ese consejo se lo doy a mi hijo Hernán, que está arbitrando en Primera C", reveló.
"Los árbitros tenemos mucho de actores. Y para entender a los periodistas hay que tratar de pensar como ellos. La renovación de los jueces es buena, pero hay que tragarse períodos de transición como los actuales. Es la única manera de que vayan apareciendo nuevas camadas", finalizó Mastrángelo, otra de las voces que se pronunciaron en contra de los manejos actuales del tan polémico y criticado arbitraje argentino.
"Antes, cuando yo dirigía, entre fines de los 80 y durante toda la década del 90, éramos seis o siete los árbitros que estábamos en casi todos los partidos, tanto en el ámbito nacional como internacional. Y los códigos eran otros", sentenció Mastrángelo en una entrevista con el programa radial Deportivo Télam, y además agregó: "En aquellos tiempos jugaba cada nene, como por ejemplo Oscar Ruggeri, José Luis Chilavert, con los que el trato era diferente porque nos conocíamos mucho”.
En tiempos en donde el arbitraje se pone en tela de juicio cada fin de semana y donde las denuncias de sobornos e incentivación se suceden cada vez con más frecuencia, Mastrángelo se encargó de contar con detalles su experiencia personal y las abismales diferencias con la actualidad: "Personalmente, siempre fui un calentón. Por eso, cuando nos cruzábamos mal en la cancha, los desafiaba a pelear afuera. Nunca tuve problemas en arreglar las cosas a las trompadas, pero sin que se enterara nadie. Y el árbitro tiene una ventaja sobre el jugador cuando está dentro de la cancha: entra armado. Pero debe saber como usar esos elementos de que dispone. Esas armas son una pistola 22, una 38 y una 45. La primera es la advertencia, la segunda es la tarjeta amarilla y la tercera la roja", sintetizó el ex colegiado.
Mastrángelo, que luego de dejar el referato se dedicó a la actuación y se recibió de periodista deportivo, contó también que aconseja mucho a su hijo, que se encuentra dirigiendo en las categorías de ascenso. “En toda mi carrera manejé esos valores y mal no me fue. Primero hay que hablarle al jugador antes de desenfundar las tarjetas. Ese consejo se lo doy a mi hijo Hernán, que está arbitrando en Primera C", reveló.
"Los árbitros tenemos mucho de actores. Y para entender a los periodistas hay que tratar de pensar como ellos. La renovación de los jueces es buena, pero hay que tragarse períodos de transición como los actuales. Es la única manera de que vayan apareciendo nuevas camadas", finalizó Mastrángelo, otra de las voces que se pronunciaron en contra de los manejos actuales del tan polémico y criticado arbitraje argentino.
Ruiz ahora manda al frente a Daniel Vila
Javier continúa con su serie de denuncias sobre la corrupción en el fútbol argentino. Ahora el ex árbitro le contó al Libre cómo eran sus reuniones con Julio .
"Pensó que me anestesiaba pero yo detrás de esta cara de pelotudo, soy un terrible hijo de puta”, apuntó Ruiz y disparó contra el empresario de medios Daniel Vila.
“Tuve siete u ocho reuniones con Don Julio. Le di una lista con 16 árbitros y le dije que si no hacía lo que tenía que hacer salía a hablar en los medios. Él no cumplió, echó sólo a diez”, aseguró.
“Tuve siete u ocho reuniones con Don Julio. Le di una lista con 16 árbitros y le dije que si no hacía lo que tenía que hacer salía a hablar en los medios. Él no cumplió, echó sólo a diez”, aseguró.
Ruiz cuenta que no fue Grondona quien lo amenazó sino que le aconsejó que se cuidara de Daniel Vila: “Le dije a Julio que si quería bajar a Vila yo tenía pruebas para hacerlo bolsa, y fue ahí cuando me dijo ´cuida a tu familia nene` como diciendo que Vila es una persona complicada”.
“Conocí a Vila a través de Brian Costa (representante de jugadores) que llevó a Jerónimo Morales Neumann a Instituto. Neumann era el novio de la hija de Vila”, sostuvo Ruiz.
“Conocí a Vila a través de Brian Costa (representante de jugadores) que llevó a Jerónimo Morales Neumann a Instituto. Neumann era el novio de la hija de Vila”, sostuvo Ruiz.
Vila es el presidente de Independiente de Rivadavia de Mendoza y según la denuncia de Ruiz lo contactó para arreglar un partido del mendocino frente a Union en 2009.
“Vila me pagó el pasaje hasta Mendoza y me hospedó en un hotel 5 estrellas”, “Yo contraté a Cristian Faraoni para ese partido” (Independiente ganó 2 a 0 y fueron expulsados dos jugadores de Unión). “Y encima quedó debiendo plata por medio de su ladero Eduardo Carbini”, dijo el ex árbitro.
“Pero la plata no decide todo, el buen juego es irrefutable. Por eso Independiente de Rivadavia de Mendoza no asciende y Godoy Cruz sí”, advirtió Ruiz.
Al consultado sobre si podía demostrar esta serie de denuncias, el ex árbitro arrepentido se mostró cauteloso: “Hay cosas que puedo demostrar, por ejemplo dónde se cambiaron los cheques, tengo depósitos hechos a nombre de mi ex pareja”, explicó.
“Vila me pagó el pasaje hasta Mendoza y me hospedó en un hotel 5 estrellas”, “Yo contraté a Cristian Faraoni para ese partido” (Independiente ganó 2 a 0 y fueron expulsados dos jugadores de Unión). “Y encima quedó debiendo plata por medio de su ladero Eduardo Carbini”, dijo el ex árbitro.
“Pero la plata no decide todo, el buen juego es irrefutable. Por eso Independiente de Rivadavia de Mendoza no asciende y Godoy Cruz sí”, advirtió Ruiz.
Al consultado sobre si podía demostrar esta serie de denuncias, el ex árbitro arrepentido se mostró cauteloso: “Hay cosas que puedo demostrar, por ejemplo dónde se cambiaron los cheques, tengo depósitos hechos a nombre de mi ex pareja”, explicó.
Ruiz reconoce que estuvo metido en el de la corrupción: “Yo era representante de árbitros, salgo a contarlo porque creo que estuve mal y me arrepiento. Pero no hice un , participé pero no hice plata. Los dos negocios que tengo los compré con la indemnización que recibí de la AFA” confesó. “De eso no me quedó un mango, lo tiré todo porque no me sentía cómodo” reconoció el ex árbitro.
Ruiz también habló de Daniel Raffa, árbitro que falleció a principio de 2011 por un ACV.
Ruiz también habló de Daniel Raffa, árbitro que falleció a principio de 2011 por un ACV.
"Iba a salir a hablar una vez que solucionara su situación con la . El conocía de Primera mucho más que yo. El ACV pudo haber tenido que ver con todo esto, el pasó muchas penurias y traiciones con Alejandro Toia (Secretario General de la Asociación Argentina de Arbitros)”.
“Raffa era de lo que yo patrocinaba, el comenzó haciendo cosas con Lunati. Por su último partido en Primera (Godoy Cruz 1 - Rosario 0) cobró sesenta mil pesos en el Hotel Urbana, en Mendoza”, concluyó Ruiz que todavía tiene cosas para contar y apunta contra sus colegas: “De Baldassi como persona podemos hablar un rato largo sobre quién es también”, amenazó.
“Raffa era de lo que yo patrocinaba, el comenzó haciendo cosas con Lunati. Por su último partido en Primera (Godoy Cruz 1 - Rosario 0) cobró sesenta mil pesos en el Hotel Urbana, en Mendoza”, concluyó Ruiz que todavía tiene cosas para contar y apunta contra sus colegas: “De Baldassi como persona podemos hablar un rato largo sobre quién es también”, amenazó.
Ex arbitro arrepentido cuenta todo sobre la corrupción del fútbol
Javier Ruiz trabajó como árbitro durante 18 años y en 2010 reconoció estar involucrado en una red de corrupción, se arrepintió y salio a contar todo lo que sabe sobre el lado oscuro del futbol argentino. "Hay árbitros que han cobrado hasta en el entretiempo, esto es un negoción", aseguró.
El ex árbitro, de 43 años, reconoció en una entrevista con el diario Libre que "hay cuatro o cinco árbitros corruptos en actividad". "Existen árbitros que meten jugadores en los clubes con la condición de no expulsarlos o amonestarlos". "Yo metí a Félix Décima en San Martín de Tucumán y me quedaron debiendo 10 mil pesos", reconoció Ruiz.
Pero la denuncia no se quedó solo en arreglos por jugadores, y afirmó que los ascensos y descensos también están digitados: "A Central lo mandaron a la B. En un partido con Godoy Cruz le cobraron un penal en contra sobre la hora que no fue y el árbitro se llevó 60 mil pesos".
"River está peleando el descenso porque los dirigentes anteriores pedían árbitros y no cumplían, había dos dirigentes de mucho peso que no cumplían y como no pagaban se corrió la bola y los mataron", aseguró Ruiz.
"Si no pagas son capaces de no dejarte pasar el medio campo, los arbitros se pasan la bola entre ellos y fuiste", agregó. "En un River-Boca uno de los dirigentes de River ofreció 80 mil dólares, pero no le creímos".
Para finalizar lo que es la primera parte de la entrevista según publico Libre, Ruiz le apuntó a Pablo Lunati: "En cuatro años se puso cinco negocios, tiene una franquicia de 100 mil dólares, una cupé BMW de 70 mil y un futuro hecho, y encima ahora se preocupa por lavar su imagen". "No entiendo por qué Grondona lo banca a Lunati", concluyó el referí que al parecer todavía tiene mucho para contar.
El ex árbitro, de 43 años, reconoció en una entrevista con el diario Libre que "hay cuatro o cinco árbitros corruptos en actividad". "Existen árbitros que meten jugadores en los clubes con la condición de no expulsarlos o amonestarlos". "Yo metí a Félix Décima en San Martín de Tucumán y me quedaron debiendo 10 mil pesos", reconoció Ruiz.
Pero la denuncia no se quedó solo en arreglos por jugadores, y afirmó que los ascensos y descensos también están digitados: "A Central lo mandaron a la B. En un partido con Godoy Cruz le cobraron un penal en contra sobre la hora que no fue y el árbitro se llevó 60 mil pesos".
"River está peleando el descenso porque los dirigentes anteriores pedían árbitros y no cumplían, había dos dirigentes de mucho peso que no cumplían y como no pagaban se corrió la bola y los mataron", aseguró Ruiz.
"Si no pagas son capaces de no dejarte pasar el medio campo, los arbitros se pasan la bola entre ellos y fuiste", agregó. "En un River-Boca uno de los dirigentes de River ofreció 80 mil dólares, pero no le creímos".
Para finalizar lo que es la primera parte de la entrevista según publico Libre, Ruiz le apuntó a Pablo Lunati: "En cuatro años se puso cinco negocios, tiene una franquicia de 100 mil dólares, una cupé BMW de 70 mil y un futuro hecho, y encima ahora se preocupa por lavar su imagen". "No entiendo por qué Grondona lo banca a Lunati", concluyó el referí que al parecer todavía tiene mucho para contar.
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